El economista Hermes Pérez explicó que la nueva medida del Banco Central de Venezuela (BCV), emitida el pasado 18 de noviembre, lo que hace es reducir el arbitraje cambiaro, lo cual se hacía antes de que existiera el control de cambio.
«Esto es una medida para reducir el arbitraje cambiario. No es una medida relativamente nueva, nosotros antes en el 2003, 2002, 2001 y 2000, el Banco Central tenía medidas similares», agregó.
«El banco lo que establece es que los bancos comerciales pueden comprar y vender dólares y van a obtener una ganancia de 1% de las operaciones al menudeo al público y de 1,5% de las operaciones al menudeo a personas jurídicas», apuntó.
«Los dólares que te estoy vendiendo, tú los vas a vender al mismo precio» y es que el «BCV observó que después de las intervenciones, mientras él vendía a un tipo de cambio a las entidades financiera, dos o tres días después algún banco vendía muy por encima ese dólar», explicó el experto.
A su juicio, la decisión del ente rector «sí estabiliza el tipo de cambio e impide que los bancos comerciales obtengan ganancias por encima de lo establecido. El segundo elemento es que el BCV insta a la banca a masificar el proceso de compra y venta de divisas, que informe al público y haga actualizaciones tecnológicas».
Dijo además haberse sorprendido, «porque lo que está diciendo el BCV es que vamos a una dolarización, y dice, si ustedes no mejoran los aspectos tecnológicos que faciliten la venta de divisas, nosotros podemos hasta sancionarlos».
Pérez también destacó que van alrededor de 62 intervenciones del BCV a las mesas de intercambio en la banca, en promedio 5 y media mensuales, una semanal. «Eso significa una quema de reservas que va por el orden de los 450 millones de dólares», detalló.
Sin embargo, el economista advirtió durante una entrevista para Unión Radio que, la desventaja con estas intervenciones, es la depreciación cambiaria, lo cual afecta a la industria nacional que debe competir con productos importados, que se subsidian con el precio de la divisa».