Hemos demostrado fehacientemente que podemos desarrollar simultánea y eficientemente varios roles. Que cuidamos la familia, somos amas de casa, somos profesionales y desempeñamos posiciones de liderazgo con igual o mejor desempeño que cualquier hombre
Tras más de 50 años de asedio, maltrato y hasta de abandono, nuestra Ciudad Bolívar no aguanta más. Ya nos llegó la hora de poner en marcha un gran movimiento de resurgimiento, de refundación de Ciudad Bolívar como ciudad capital y como verdadero epicentro del desarrollo económico de toda Guayana. Y las mujeres somos parte esencial del gran movimiento de refundación de nuestra capital. Así inicia esta conversación Ana María Romero MacMillan, líder femenina de Fuerza Vecinal en nuestra gloriosa capital.
Durante los últimos 50 años, en el Estado Bolívar se ha apostado a un crecimiento económico enfermizo y patológico. Se ha favorecido el crecimiento-más no el desarrollo- del municipio Caroní en detrimento y a costa del sacrificio del resto del Estado. A Caroní le dedican lo mejor de la acción estatal mientras el resto de los municipios son exprimidos hasta el agotamiento. Y la mayor víctima de este despropósito ha sido, indudablemente, Ciudad Bolívar y el municipio Heres en su totalidad. Hoy por hoy, Caroní está quebrado pues quebraron las empresas básicas, y con el agoniza el resto del Estado pues fuimos despojados de nuestras fuentes naturales de generación económica. Y ya es hora de ponerle un parao a esto, es hora de movilizarnos, de activarnos para lograr recuperar nuestras fuentes primarias y competitivas de actividad económica.
En este despertar de la capital, las mujeres, sin duda alguna, tendremos un papel decisivo, protagónico y determinante. Hoy por hoy, las mujeres somos un verdadero ejército de cambio: nos hemos formado profesionalmente en cualquier ámbito de la academia, la política, la gerencia y también en las artes. Hemos demostrado fehacientemente que podemos desarrollar simultánea y eficientemente varios roles. Que cuidamos la familia, somos amas de casa, somos profesionales y desempeñamos posiciones de liderazgo con igual o mejor desempeño que cualquier hombre. Eso nos hace particularmente interesantes en ese movimiento liberador; cuando la nueva y gran Ciudad Bolívar sea una reconfortante realidad, en la historia estará escrito-te lo puedo asegurar- el nombre de muchísimas mujeres como protagonistas de este milagro transformador que hoy en día se está gestando en nuestra amada Angostura.
La líder femenina de Fuerza Vecinal se detiene un poco, se moja los labios como saboreando loe que está pensando y ha de decir: estamos iniciando una gran evolución ciudadana, educando, liderando cambios en positivo, empoderando a la gente de conocimiento básico y esencial. Estamos haciendo que la gente internalice que somos la capital, que somos un puerto inactivo y que debe ser reactivado, que somos un destino turístico sumamente atractivo, que tenemos con que desarrollarnos plenamente y que no hay justificación para estar como estamos.
