La estatal petrolera venezolana decide abandonar las ambiciones del régimen de Nicolás Maduro, recortando el objetivo de producción.
Petróleos de Venezuela (PDVSA) redujo en un tercio su objetivo de producción. La situación ocurre por las fallas que arrastra la industria desde que la gerencia chavista la controla desde hace más de 20 años.
El último reporte de Bloomberg sobre la petrolera venezolana, detalla que la estatal redujo su objetivo de producción diaria a 1 millón de barriles, de la cifra de 1,5 millones de barriles que anunciaron en enero.
Según documentos y una fuente a la que tuvo acceso la agencia de noticias financieras, en la cuenta de río Orinoco la meta se redujo de casi 1 millón a 650 mil barriles.
Una decadente situación debido a la gestión chavista, leyes que espantaron a empresas extranjeras y las sanciones estadounidenses, PDVSA tuvo que revisar sus objetivos de producción al menos en tres ocasiones. Todo esto desde que Maduro estableció el inalcanzable objetivo de 2 millones de barriles a inicios del año 2020.
De esta forma, Venezuela se está perdiendo gran parte de la bonanza que trae el alza de los precios del crudo Bren. Este petróleo aumentó casi un 60% este año. Los precios podrían experimentar un repunte más alto que el de 2009, para final de año.
Según el documento al que tuvo acceso Bloomberg, PDVSA está centrada en «recuperar y estabilizar la producción» de 2022 a 2025.
El plan quiere asegurar un flujo constante de petróleo para abastecer las refinerías nacionales y convertir el resto del crudo en grados comerciales para exportar. El petróleo de la nación suramericana es de un nivel altamente espeso, por lo que necesitan diluirlo con aditivos antes de ser enviado al extranjero.
Con la producción situada en 527 mil barriles en septiembre, la expectativa reducida a 1 millón de barriles diarios, sigue pareciendo exagerada.
Primer Informe