Con información de Prensa C-cura
Puerto Ordaz, 20 de abril de 2022. En Sidor desde hace varios días se está produciendo una rebelión genuina de las bases obreras, pasándole por encima a los directivos burocráticos, gobierneros y traidores de Sutiss y de la FBT.
Desde el lunes los trabajadores decidieron levantarse contra los continuos atropellos, los salarios de hambre, la destrución de su contrato colectivo, y la represión gubernamental. Primero decidieron una operación morrocoy, lo cual inmediatamente se convirtió en una huelga de brazos caídos.
En la plantas de laminación en caliente, planta de pellas, barras, alambrón, midrex, planta de oxigeno, palanquillas y planchones, los trabajadores con sus propias fuerzas y métodos de lucha, decidieron en asambleas tomar las plantas y parar la producción exigiendo que la directiva de la empresa y su presidente Néstor Astudillo, reconozcan el aumento de salario decretado por el gobierno recientemente. Los sidoristas exigen que el salario sea acorde al costo de la canasta básica, que se respete el tabulador de Sidor, y rechazan la nueva tabla o maqueta de salarios que la empresa pretende imponerle a los trabajadores, quitándole beneficios conquistados en años de lucha, exigiendo que respeten todas las primas, así como el reingreso a sus puestos de trabajo de los trabajadores que no están activos.
Trabajadores de planta de pellas de brazos caídos
La lucha de los sidoristas es la misma de la mayoría de las trabajadoras y trabajadores del sector público, que fueron burlados recientemente con unas tablas salariales que disminuyen sensiblemente sus beneficios salariales.
Las catorce plantas que están semiproductivas están paralizadas en este momento, a pesar de que el gobierno militarizó los portones; impide que los trabajadores aborden los transportes para ir a la planta, mientras sigue el amedrentamiento. El gobierno a través de la directiva de la empresa metió al Faes, al Sebin, Guardia Nacional y el Dgcim, pero aún así los trabajadores siguen firmes, y sin miedo se mantienen en las plantas a pesar de la represión del gobierno.
En el resto del país poco se sabe de esta heroica lucha que llevan adelante los sidoristas, que puede convertirse en una chispa, en un detonante para un gran movimiento de la clase obrera venezolana contra el paquetazo de ajuste que el gobierno de Maduro instrumenta y con el cual le quiere hacer pagar la crisis al pueblo trabajador.
La situación de los trabajadores de las empresas básicas de Guayana es de miseria absoluta. Los ojos de los trabajadores de todo el país deben estar puestos en esta lucha. El gobierno miente al afirmar que estas empresas están productivas. La apertura está limitada a ciertas áreas, y los montos de la producción están muy lejos de los que se lograban en el pasado.
Es importante que todos los sindicatos, corrientes sindicales y activistas obreros de todo el país, tanto del sector público como privado, expresen su solidaridad con esta lucha de los sidoristas.