Aumentaron los bonos, pero no el salario. Los anuncios económicos hechos por el gobernante Nicolás Maduro en su memoria y cuenta de 2023 siguen el mismo orden de las medidas tomadas en los últimos años
El salario mínimo ya se acerca a los 700 días sin recibir ajuste y los trabajadores tienen que seguir dependiendo de los bonos que no se reconocen en las prestaciones sociales.
Los jubilados y pensionados cobrarán 70 y 25 dólares, respectivamente, anunció el martes, 16 de enero, la vicepresidenta Delcy Rodríguez. Maduro dijo que estos anuncios económicos eran un “primer empuje en el año”, algo que no convence del todo a quienes luchan por las reivindicaciones laborales.
Carlos Salazar, miembro de la Coalición Nacional Sindical dijo a Efecto Cocuyo que el salario se mantiene “por debajo de la mesa en el tema social y económico del gobierno. Sólo se dedican a sus planes políticos”.
Para Hermes Pérez, economista venezolano, “la bonificación va en contra de uno de los mayores logros salariales alcanzados hasta ahora… el salario mínimo se ha mantenido inalterado en los últimos 22 meses y en ese tiempo la inflación acumulada es de 782%”.
La respuesta de los trabajadores a los anuncios económicos de Nicolás Maduro
“El venezolano no tiene poder adquisitivo”, enfatizó Salazar, de la Coalición Nacional Sindical venezolana e hizo una comparación con los estándares que maneja la ONU en el tema de los salarios a nivel mundial.
Se considera extrema pobreza una situación en la que una persona percibe máximo 3 dólares por día.
“Ninguno de los bonos representan salario para Nicolás Maduro… nosotros estamos entrampados. Los únicos vencedores son los empresarios malos y el gobierno”, dijo Salazar a Efecto Cocuyo.
Ya son casi 700 los días que suman los venezolanos sin un aumento de salario. Durante 2023, el gobierno de Maduro optó por la política de la bonificación que no genera estabilidad en los ingresos de las personas ni, hasta ahora, tiene un impacto en el pago de prestaciones sociales.
“Ellos quieren seguir vendiendo al mundo de que en Venezuela hay mano de obra barata. Como en China y en Cuba. Gracias a Dios que el movimiento sindical venezolano está bien plantado”, comentó Carlos Salazar.
El activista venezolano fue enfático al afirmar que el bono de alimentación que debería recibir el venezolano tendría que estar ajustado al valor de la canasta básica. “Tenemos un gobierno que incumple todo”, dijo Salazar.
“El gobierno no está interesado que se active el aparato económico. La producción de un país no está en la importación que es lo que pretenden hacer con Alex Saab… este país no se está moviendo en la producción”, enfatizó el miembro de la Coalición Nacional Sindical.
La visión de un economista venezolano: hay mucha opacidad en los datos
Por su parte, el economista Hermes Pérez dijo que hay “un conjunto de pagos que dependen del salario, que, de mantenerse esta política de no aumento, causará que todos estos conceptos caigan a cero. Como por ejemplo las vacaciones y el bono vacacional”.
Este tipo de conceptos son de suma importancia para los trabajadores venezolanos, pues forman parte de conquistas que se forjaron en las calles del país hace varios años y con las que contaban la fuerza laboral del país.
“Las prestaciones sociales… como no se ha aumentado el salario mínimo y la escala salarial se ha mantenido inalterada esto también tiene a cero con el tiempo”, comentó el economista venezolano. También mencionó que este tipo de cosas pasan con las jubilaciones y pensiones. “Es una política muy dañina para los trabajadores”, resaltó Pérez.
El economista también aseguró que es casi imposible analizar el alcance de los bonos anunciados por Nicolás Maduro. “Con la opacidad fiscal tan enorme que hay se hace muy difícil saber cuál es el alcance de esta medida”, indicó el experto venezolano.
“Sabemos que se va a pagar un bono pero no sabemos cuándo lo reciben, quiénes lo reciben y por qué lo reciben”, relató Pérez, quien también es jubilado de la administración pública.
“Hay opacidad por diseño de las cifras públicas. Datos que deberían publicarse como los ingresos del gobierno… existe una opacidad sobre los datos económicos del país. Así es muy difícil analizar cualquier anuncio o hacer un diagnostico serio porque no hay data que avale o que nos diga cómo se está comportando la economía venezolana”, concluyó Pérez.
Efecto Cocuyo