Productores de todo el país insisten en la necesidad de abastecer de combustible al sector primario para poder surtir de alimento a las ciudades
Barinas. La información de productores que se deshacen de sus cosechas por la falta de combustible ha hecho ruido en medios de comunicación y redes sociales, pero los agricultores tienen claro que tanto la gasolina como el gasoil son imprescindibles en la producción agrícola.
“En un país donde casi 100 % de los recursos empleados en la actividad agrícola requieren de combustible, sin duda que la escasez de gasolina resulta trágica para los productores del campo de cualquier nivel, sea pequeño, mediano o gran productor”, señala María Alejandra Colmenares, productora de leche Santa Rosa y vicepresidente de la Asociación de Ganaderos del municipio Rojas (Asoganrojas).
La gasolina se emplea en una primera etapa para transportar los insumos desde las comercializadoras hasta las unidades de producción. En el caso de los ganaderos, si es época de verano, se utiliza en las motobombas para surtir agua a los animales; y en el caso de la agricultura, para regar las plantaciones.
Se requiere en todas las etapas de la cosecha –dice Josefina Herrera, presidente de la Unión de Ganaderos de la parroquia Páez, (Ugapaez)– en la preparación de tierras, de siembra, de mantenimiento y para llevarla desde las unidades de producción hasta los centros de acopio.
Indica que si son las cosechas hay que trasladarlas hacia los centros de distribución y los ganaderos necesitan combustible para sacar la leche, el queso y la carne que se consume en la mesa de los venezolanos.
Maquinaria de trabajo
En lo que concierne al gasoil, se emplea mayormente en los tractores para realizar las labores de preparación de la tierra, la siembra, las labores propias del cultivo hasta llegar a la cosecha.
En el caso de los ganaderos, el gasoil se utiliza en tractores, sembradoras para el pasto o limpiar potreros a través de la fumigación.
María Colmenares, productora de leche del municipio Rojas, enfatiza la exposición de Herrera. El combustible se emplea en la guadaña para limpiar los potreros, mantenimiento de cercas y control de maleza en los cultivos previo a la siembra o en la etapa de crecimiento.
La extracción de agua por medio de motobombas para el riego de cultivos, de potreros, los bebederos del rebaño también dependen del combustible. La fumigación de cultivos con bombas de espalda. Sin olvidar, por supuesto, el uso de las plantas eléctricas cuando ocurren los constantes cortes o racionamientos de energía.
Los productores quisieran mudar hacia un sistema de energía a través de paneles solares, pero para eso también se requiere invertir en tecnología.
Lo que no se ve en video
Recientemente, circulaban a través de las redes sociales imágenes de un productor de Pueblo Llano, en Mérida –a tres horas del estado Barinas–, que en medio de su dolor y frustración opta por desechar una cosecha de zanahorias, fruto de su trabajo. Ocurrió lo mismo en Carache, estado Trujillo, con una cosecha de tomates. Ambos agricultores fueron llevados al Ministerio Público tras la difusión de estos videos.
Para llegar hasta Pueblo Llano se requiere tomar la vía del piedemonte andino entre Barinas-Mérida, luego desviarse a mano derecha para realizar un recorrido hacia las montañas. “Imagine usted la travesía para lograr sacar la producción desde este lugar”, dice José Antonio Espinoza, presidente de la Asociación de Productores Rurales del estado Barinas (Asobarinas).
El combustible es vital para los productores, más para los del sector agrícola. No es que el productor botó su cosecha sino que se pierde por no poderla sacar a tiempo”, explica.
Añade que la agricultura no espera como la ganadería: “¿Sabes todo lo que cuesta que un labriego le ponga la espalda al sol todo un día y que al final no tengas cómo sacar tu trabajo?”.
Adaptarse para sobrevivir
Josefina Herrera explica que el combustible es una variable que antes no se consideraba: “A la hora de desarrollar cualquier actividad agrícola o pecuaria, se debe incluir el combustible dentro de los costos de producción, junto con otros insumos como fertilizantes, insecticidas. Antes no se incluía, hoy en día es obligatorio”.
Y esto aplica como prioridad a los productos perecederos. “La leche se le puedes dar a los becerros, pero ¿cómo haces para sacar la cosecha a los centros de acopio?”.
Entre esos procesos de adaptación, o regreso a lo rudimentario, explicó Espinoza, han quedado varadas las máquinas desmalezadoras o las guadañas. Ahora se contratan obreros para que realicen el rudimentario trabajo de corte de machete para mantener limpios los predios.
“¿Cómo hace un productor que tiene ordeños mecánicos cuando le cortan la electricidad? y ¿cómo hace para encender la planta eléctrica sin gasolina?”, se pregunta Espinoza, de Asobarinas.
Informa que existe un plan de siembra entre el Ministerio de Agricultura y Tierras y la asociación, para brindar apoyo a un pequeño grupo de productores que siembran maíz y yuca, con 400 litros de combustible cada 15 días; sin embargo, resultan insuficientes cuando existen alrededor de 6000 productores en todo el estado que también demandan ayudas.
María Alejandra Colmenares, de Asoganrojas, pide especial atención contra las mafias que comercializan la gasolina en tiempos críticos, pues vende en 2,5 y 3 dólares el litro del combustible.
Crónica Uno