Ivanna Laura Ordoñez @ivannalauraor
Patricia Valenzuela, médico infectólogo y vicepresidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología, precisó que en el país aún no existe evidencia científica para aplicar la combinación de vacunas, por lo que recomienda esperar a las personas hasta que llegue la segunda dosis para completar el esquema de inmunización.
Caracas. María Moreno llama todos los días a casa de su hija para preguntarle si sabe algo de la segunda dosis de la vacuna. María tiene 83 años, vive en Caricuao y es paciente diabética. Fue vacunada contra la COVID-19 hace más de 21 días con la primera dosis de Sputnik V, su hija la llevó a un punto de vacunación cerca de su casa, en la parroquia 23 de Enero, porque “en el punto de Caricuao las colas eran más largas y había más confusión” con respecto a la vacunación.
Ahora María es parte de la cifra de personas vacunadas con una primera dosis de Sputnik V en Venezuela, y que están a la espera de la segunda. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) sigue reportando que al menos 1.223.130 personas han recibido una primera dosis en el país (1.446.988 dosis aplicadas en total), a pesar de que el pasado 14 de julio la OPS expresó que recibió una actualización por parte del Ministerio de Salud de que 2,2 millones de dosis han sido aplicadas en el territorio nacional.
El proceso de vacunación masiva en Venezuela inició el pasado 29 de mayo con la activación del punto ubicado en el Hotel Alba Caracas, en pleno centro de la ciudad. Posteriormente, a partir del 19 de junio, se empezaron a cumplir los plazos para la aplicación de segundas dosis.
Pero hasta el momento, algunas de las personas vacunadas en el Alba Caracas y en el resto de los puntos instalados en el país a partir de junio, han sido inmunizadas con las segundas dosis de Sputnik V. En el caso de María, la segunda dosis le tocaba el 30 de junio, por lo que ya está por cumplir el primero de los tres meses de plazo para la aplicación del segundo componente de la vacuna desarrollada en Rusia, según los estudios del Centro Gamaleya.
La problemática con las segundas dosis de Sputnik V en Venezuela empezó a evidenciarse desde inicios de junio, cuando personas vacunadas en el Hospital Dr. José Gregorio Hernández de Los Magallanes de Catia tampoco recibieron la segunda dosis en la fecha estimada.
Escasez de Sputnik V
En Argentina también se ha reportado escasez de segunda dosis de Sputnik V. Según una publicación del medio El Economista, en Argentina existen 2,7 millones de personas mayores de 60 años que esperan completar el esquema de vacunación de Sputnik V con la segunda dosis. Pero a diferencia de Venezuela, el gobierno argentino acordó con Rusia fabricar vacunas Sputnik V en su país.
Otro país que ha presentado problemas con los envíos de dosis de Sputnik V fue Guatemala, cuyo Ministerio de Salud consideró pedir la devolución del dinero debido al retraso en el envió de los ocho millones de dosis acordadas entre el Fondo Ruso de Inversión Directa (FRID) y el gobierno de Guatemala.
En febrero, el gobierno de Nicolás Maduro aseguró que invirtió 200 millones de dólares para adquirir 10 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik V.
En junio pasado, Dmitri Peskov, portavoz del gobierno de ruso, declaró que Rusia cumplirá con todas sus obligaciones de distribución de Sputnik V a otros países, sin embargo, enfatizó que la “prioridad absoluta” en este momento es satisfacer la demanda interna.
En la actualidad, Rusia registra más de 23.000 casos positivos y 700 decesos por día. En total, el país euroasiático contabiliza 6.006.536 contagios y 149.922 muertes por COVID-19 desde que inició la pandemia, según datos de la agencia rusa de noticias Sputnik.
Rusia tiene una población aproximada de 144,4 millones de ciudadanos. Según datos de Our World in Data, en Rusia han administrado 52,9 millones de primeras dosis, 20,8 millones han recibido las dos dosis, por lo que solo 14,4 % de la población ha sido inmunizada contra la COVID-19, a pesar de haber desarrollado su propia vacuna.
Combinar vacunas
Luego de la aparición de casos de trombosis en personas vacunadas con primera dosis de la vacuna de AstraZeneca, la Comisión de Salud Pública y el Comité de Bioética de España aprobaron la posibilidad de combinar el esquema de vacunación de personas ya inmunizadas con primera dosis de AstraZeneca, con segunda dosis de Pfizer, luego de comprobar a través de ensayos clínicos que no hay efectos adversos graves y que existe un fuerte porcentaje de inmunidad.
De igual forma, el Ministerio de Salud de Argentina también estudia combinar una primera dosis de Sputnik V con una segunda dosis de las otras vacunas disponibles en el país (AstraZeneca, Sinopharm y Covishield), ante la demora del segundo componente de la vacuna rusa.
Flor Helene Pujol, investigadora emérita y jefa del laboratorio de virología molecular del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), explicó que no se recomienda mezclar vacunas sin antes haber realizado ensayos clínicos que involucren a un centenar de personas en los que se pueda evaluar posibles efectos adversos y la inmunogenicidad, y así comprobar que ese posible esquema combinado es efectivo y seguro.
Probablemente, los esquemas híbridos vayan a funcionar pero no podemos inventar. Todo debe hacerse primero bajo la modalidad de un ensayo clínico y si funciona, entonces sí se pueden proponer este tipo de esquemas híbridos”, declaró Pujol.
Patricia Valenzuela, médico infectólogo y vicepresidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología, precisó que en el país aún no existe evidencia científica para aplicar la combinación de vacunas, por lo que recomienda esperar a las personas, como María, que tienen solo la primera dosis de Sputnik V, hasta que llegue la segunda dosis para completar el esquema de vacunación.
La mayoría de las vacunas tienen plataformas de mecanismos de acción diferentes y a la hora de evaluar un ensayo clínico combinándolas se necesita tiempo para detallar la evidencia y la estadística. Lo ideal es que el esquema de vacunación sea completado tal cual como se hicieron los estudios clínicos de fase 3 de cada vacuna”, explicó Valenzuela.
Los estudios clínicos de la Sputnik V arrojaron una eficacia del 97,6 % contra la COVID-19 aplicando las dos dosis, y 79,4 % con la monodosis Sputnik Light, la cual está fabricada con el primer componente (adenovirus humano recombinante serotipo 26 (rAd26)) de la Sputnik V.
Un mes sin recibir vacunas
El pasado 12 de julio, Venezuela cumplió un mes sin recibir vacunas, al menos de forma pública. El último cargamento que llegó fueron 500.000 dosis de Sputnik V, para completar 1.430.000 dosis que han llegado desde Rusia al país, más 1,8 millones de dosis de Sinopharm provenientes de China. En total, Venezuela ha recibido 3.230.000 vacunas.
En la actualidad, el país se encuentra a la espera de un primer cargamento de vacunas gestionadas a través del mecanismo Covax. Durante la sesión informativa de la OPS de la semana pasada, Ciro Ugarte, director de Emergencias en Salud de la organización, informó que las autoridades venezolanas se encontraban revisando las opciones de vacuna disponibles, entre las que están dosis de Sinopharm y Sinovac.
Este lunes Venezuela registró 1087 casos nuevos de COVID-19. La semana pasada el país registró un total de 7788 contagios de esta enfermedad ocasionada por el nuevo coronavirus, esto según datos del gobierno de Maduro. Desde la Academia Nacional de Medicina y de la Sociedad Venezolana de Infectología han advertido que el país aún se encuentra en la segunda ola de casos masivos, la cual se ha prolongado desde finales de febrero.