La elección presidencial para el periodo 2019-2025 ha sido calificada de tramposa debido a un armadijo electoral descarado y a ello, in discutiblemente, la nación venezolana debe la penosa situación nacional e internacional que padece, caracterizada por la escasez en aspectos realmente vitales.
Ha sido calificada de “tramposa” por la evidente falta de transparencia y garantías electorales. La elección, al carecer de transparencia en el proceso de convocación y realización, además de denuncias presentadas en contra de su utilización referente a puntos políticos cercanos a los centros electorales, y la parcialidad del Poder Electoral, fue criticada internacionalmente. Se registró la abstención más alta en la historia de los comicios presidenciales desde la llegada de la democracia en 1958. De allí, la serie de comunicados donde se expresa el desconocimiento de Nicolás Maduro como presidente, incluyendo no sólo al Alto Comisionado de la ONU, a la OEA y UE, sino a los partidos mayoritarios de la oposición, parte de las bancada de la Asamblea Nacional y la Conferencia Episcopal. La elección presidencial para el período 2019-2025 se llevaron a cabo el domingo 20 de mayo de 2018. De los habilitados para votar, 20 526 978. sólo lo hizo el 36,6 por ciento. El resto se abstuvo disgustado por la inhabilitación de los candidatos con opción. El Poder Electoral sólo aceptó de la oposición a Javier Bertucci (1.015.895 votos), y Henri Falcón (1.927.387). El Poder Electoral proclamó a Maduro con 6.245.862 votos, (AF)
