Gretta M Gil Anzola @srtawilde91

La alianza multisectorial ciudadana expuso sus objetivos para contribuir con la solución crisis que atraviesa la educación venezolana desde los últimos años.

Caracas. Competitivo, de calidad, participativo, versátil, tecnológico, inclusivo, plural y meritocrático. Así definieron el sistema educativo que aspiran para Venezuela los participantes de la convocatoria de Todos por la Educación, celebrada este jueves 30 de septiembre en Caracas.

Esta Alianza forma parte de la iniciativa de la Plataforma Nacional de Activismo de “Gritemos con Brío”, cuya misión es promover que se reviertan las prácticas autoritarias del Gobierno nacional responsables del declive del sistema educativo.

Sofía Marquina, miembro de Todos por la Educación por el estado Miranda, explicó que cuentan con una alianza estratégica con FundaRedes, Aula Abierta, Fundación Arturo Uslar Pietri, Unidad Democrática del Sector Educativo y la Federación Nacional de Estudiantes de Educación, con el fin de profundizar la documentación de cómo se ha visto afectado el sector académico.

Desde septiembre del 2020 se han encargado de investigar, denunciar y proponer soluciones para resolver el deterioro que sufre la educación venezolana.

Marquina precisó que la raíz del problema ha sido la falta de inversión tanto pública y privada; además de las prácticas autoritarias gubernamentales, a través de la opacidad y el adoctrinamiento político.

Por otra parte, la alianza multisectorial consideró que la pandemia de la COVID-19 agudizó la precariedad de los docentes para ejercer su profesión, así como la de los estudiantes para acceder a las clases. “La educación es un derecho al que deben acceder todos y también es un deber garantizar que sea posible, señaló Marquina.

La magnitud del reto

Daniel Maldonado, miembro de Todos por la Educación por parte del estado Miranda, enfatizó en la urgencia de replantear la participación ciudadana en el sistema educativo y en que la educación debe convertirse en una prioridad nacional, pues sostiene que esta también forma parte de la crisis humanitaria que atraviesa Venezuela.

También compartió tres datos significativos que exponen el reto que enfrenta el país para reconstruir el sistema educativo:

  1. Más de tres millones de jóvenes entre los 3 a 24 años de edad se encuentran excluidos del sistema educativo nacional, información basada en la proyección que publicó la escuela de Educación de la UCAB.
  2. 90 mil maestros han abandonado las aulas entre los años 2015-2021, dato que también forma parte del trabajo publicado por la casa de estudios.
  3. Según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi), durante el estudio que levantaron en 2020, tan solo el 46% del quintil más pobre del país logra completar los 12 años de escolaridad hasta el bachillerato.

El pasado 29 de septiembre, la Encovi presentó el nuevo informe, donde señaló que solo el 65% de la población estudiantil está inscrita en un centro educativo y muestra que hubo una caída de cinco puntos en comparación al trabajo del periodo 2019-2020, es decir por los menos 550 mil alumnos no fueron inscritos para el año académico 2020-2021.

Lo que aspiran

María Victoria Restrepo, coordinadora regional de Todos por la Educación en Miranda, explicó el basamento legal de la organización, contemplado en los artículos 102, 103 y 104 de la Constitución venezolana, referidos a las obligaciones del Estado para garantizar el derecho humano de la educación.

La educación debe ser la agenda principal del país, la descentralización generaría mejores resultados para reestructurar el sistema educativo”, resaltó Restrepo.

Asimismo señaló las cinco cifras que el gobierno debe hacer de dominio público:

  1. Porcentaje del presupuesto que destina el estado venezolano  al sistema educativo a través de sus distintos órganos.
  2. Número de docentes activos en el país, las implicaciones que esto conlleva al acceso a la educación y en la inversión monetaria que se hace.
  3. Número de instituciones educativas operativas y la proyección de las necesidades acumuladas durante los últimos años.
  4. Número de estudiantes que asisten regularmente a los planteles.
  5. Déficit de docentes especialistas en áreas críticas como matemáticas, ciencias, física, química, idiomas, entre otras.

La coordinadora regional aclaró que el compromiso de la organización es exigirle a las autoridades que publiquen esta información o que hagan el estudio pertinente, así como garantizar que se cumpla el derecho al acceso a una educación de calidad y condiciones de trabajo dignas a los docentes.

Cronica Uno