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Tito, alcalde de Fospuca | por Américo DeGrazia

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“Cada fracaso le enseña al hombre algo que necesitaba aprender.”

Charles Dickens 

Américo De Grazia 

Upata 20 de Febrero 2023 

Cd Guayana nace oficialmente el 2 de Julio de 1961, de la era democrática , con la fusión de dos ciudades entre los ríos Orinoco y Caroni. Sumando Pto Ordaz, al margen oeste del Río Caroni y San Félix, al este del mismo río. Fue la primera ciudad planificada íntegramente por la Universidad de Harvard en EEUU. Se desarrolló un parque industrial y se construyó un complejo hidroeléctrico moderno, capaz de generar el servicio eléctrico requerido por el país. Ese cuento de hadas feneció en manos de Chavez y Maduro. Todo el sueño de ser la alternativa no petrolera de Venezuela, naufragó en medio de la locura revolucionaria. Fuimos la ciudad más próspera, limpia, moderna y con futuro, de la nación. 

Pero hoy, Cd Guayana está quebrada, sus habitantes empobrecidos hasta la mendicidad, sus trabajadores, otrora vanguardia laboral de Venezuela operan empresas chatarreadas, sin contratación colectivas y beneficios confiscados por el memorándum 2792. Los maestros protestan en la calle porque la inflación les comió el salario; el transporte público es una especie en extinción. A pesar que la ciudad esta diseñada entre los dos rios más caudalosos del país, el agua en nuestros hogares está ausente. Los hospitales construidos en democracia, colápsados, el materno infantil Menca de Leoni, cerrado hace 5 años. La alcaldía brilla por su ausencia, nadie conoce al alcalde. El gobernador solo aparece en vallas. Nadie da la cara por la ciudad más poblada del Edo Bolívar

En el marco de ese escenario deprimente y luego de abandonar la ciudad a su suerte, donde la basura se comió la urbe entera, colonizados por los zamuros, roedores y garrapatas, el alcalde decide entregar entre gallos y media noche, un contrato leonino, sin previo aviso, sin licitación, sin que se conozca o se dé a conocer los alcances del convenio, en forma clandestina y obvios signos de opacidad y corrupción, otorgándole a la empresa FOSPUCA, con plenos poderes plenipotenciarios la tarea recolectar la basura, mantenimiento de la ciudad, administrar el vertedero, fijar las tarifas, cobrarlas y ejecutar embargos contra los ciudadanos o empresas en mora. Poniendo al servicio de ella, todo el poder del régimen en alfombra roja, con jueces para ejecutar medidas de embargo, fiscales para instruir expedientes, GNB, para ejecutar las medidas, PNB para resguardar el sitio ejecutado, policía municipal de mensajeros, calabozos del SEBIN para domar a los “alzados”, DGCIM por si se requiere. El monopolio de FOSPUCA es indefendible, en medio de una Guayana, donde él hambre y la pobreza, duelen. 

Tito Oviedo, dejó de ser el Alcalde de Caroni, para convertirse en el burgomaestre de FOSPUCA. Por este camino, esta empresa terminará nombrando jueces, fiscales y defensores del pueblo, en el mejor estilo de la “Compañía Guipuzcoana”, en los tiempos de la colonia; esa es la dimensión del retroceso. Pertinente convocar un cabildo abierto, para debatir abiertamente el destino de nuestra ciudad y sus habitantes. Es la hora de dar la cara.