PDVSA renunció a su participación de 49% en una refinería dominicana como parte de un canje por algunos de sus bonos impagos, dijo el jueves el Ministerio de Hacienda de República Dominicana en un comunicado la petrolera estatal venezolana.
La transacción representa un pequeño avance entre la petrolera y sus acreedores, debido a que las sanciones de Estados Unidos, que buscan sacar del poder al dictador Nicolás Maduro, complican los esfuerzos para reestructurar miles de millones de dólares en deuda que PDVSA y el régimen han dejado de pagar en medio de un colapso económico.
Como parte del acuerdo, la subsidiaria de PDVSA, PDV Caribe, primero canjeó sus acciones en la refinería Refidomsa, de 34.000 barriles por día (bpd), por bonos mantenidos por PATSA Ltd, una unidad de la empresa dominicana de cacao Grupo Rizek. La empresa actuó como un “facilitador” de la transacción, mencionó el ministerio.
PATSA vendió inmediatamente las acciones al gobierno dominicano, que ya poseía el 51% restante de la refinería. La operación fue por 74 millones de euros (unos 88,1 millones de dólares). Ahora la refinería pertenece en su totalidad del gobierno dominicano.
El Ministerio de Hacienda de República Dominicana dijo que las sanciones a PDVSA habían complicado la capacidad de Refidomsa para acceder al crédito e invertir en proyectos de expansión, y agregó que informó al gobierno de Estados Unidos del acuerdo y que Washington no se opuso.
A pesar de que la operación fue a un precio mucho menor del que pagó, el gobierno de Maduro celebró el hecho y calificó el negocio como exitoso. “El Gobierno Bolivariano de Venezuela y PDVSA, concluyen de manera exitosa, la negociación de REFIDOMSA, y con ello se honran los compromisos financieros adquiridos con acreedores, destacando nuestra solvencia y responsabilidad, a pesar del bloqueo criminal de los EEUU”, escribió en su cuenta de Twitter Tareck El Aissami, ministro del Poder Popular de Petróleo.
Estados Unidos incluyó a PDVSA en una lista negra en 2019 en un esfuerzo por cortar el flujo de efectivo a Maduro, a quien califica de dictador y acusa de corrupción, además de haber manipulado su reelección en 2018.
Ni PDVSA ni el Ministerio de Comunicación venezolano respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios. Maduro se refiere a las sanciones como un “bloqueo criminal” y los culpa por los problemas económicos de Venezuela.
(Con información de Reuters/Infobae