“Cuando el pueblo teme al gobierno, hay tiranía, cuando el gobierno teme al pueblo hay libertad”.
Thomas Jeferson
Upata 31 de Julio del 2023
Américo De Grazia
Maduro perdió la calle, pero antes la había perdido Chávez y, ellos dos, dejaron que Venezuela perdiera PDVSA, las FANB, las fronteras, la institucionalidad, la moneda, el salario, el respeto, la salud, la educación, la libertad de expresión, las empresas del Estado y los servicios elementales. Se suele decir, que una lucha siempre debe darse observando tres reglas básicas, “…con razón, sin excesos y con ventajas”. El poder sin límites ni control, les hizo perder la razón; sin ella, se desbocaron en excesos; y las ventajas degeneraron en ventajismos obscenos. Así fue desde el principio.
Apropósito de celebrase el bicentenario de la batalla del naval sobre el lago de Maracaibo, el pasado 24 de Julio; Maduro intentó lucir su liquilique blanco con la bandera tricolor cruzándole el pecho, al bajarse de su lujosa limusina las pitas no se hicieron esperar. Humillado por la indignación popular, dio media vuelta y regresó a su ostentosa carroza. No obstante ya le había ocurrido un hecho similar en San Félix, Guayana, el 11 de Abril del 2017, día de la batalla de Chirica, al ser recibido con tomates, huevos y chiflas, hasta hacerlo huir del desfile.
Ni Maduro, ni ninguno de su entorno, pueden presentarse en escenarios abiertos y no controlados. Tampoco podía hacerlo Chávez, recuerden que éste dejó de presentarse en los juegos entre Caracas y Magallanes, por temor al abucheo colectivo. Pasaron de la aclamación popular al aborrecimiento colectivo, sin anestesia. Ellos le expropiaron la esperanza a los ciudadanos y estos le expropiaron el afecto y el respeto. Todo esto contrasta con dos episodios que me tocó ver de cerca; vi llegar a pie, al “Gran Café” de Sabana Grande al ex presidente Carlos Andrés Perez, tomarse un café en la barra y continuar camino a su oficina en la Torre las Delicias. Luego tuve oportunidad de ver como ciudadano de a pie, al ex presidente Luis Herrera Campins, usando el Metro de Ccs, que él mismo había inaugurado durante su gestión. ¿Podrán Maduro, Cilia, Jorge Rodríguez, Diosdado u otro miembro del antro, hacer lo propio?