Docentes venezolanos continúan protestando en las calles mientras se acerca el reinicio de las clases, pautado para la primera semana de octubre de 2022 según anunció el mandatario Nicolás Maduro a finales de agosto. Las dudas sobre la forma en la que se regresará a las aulas aumentan a la vez que los profesores y profesoras exigen mejores condiciones laborales.
Aunque los educadores insisten en que no dejarán de lado sus exigencias, representantes de gremios indican que irse a un paro no es la opción principal. Algunos señalan que está «sobre la mesa», en caso de que el gobierno se niegue a responder y que la emergencia educativa, declarada por las federaciones en junio de este año, se agrave.
La última protesta fue organizada frente a la sede del Instituto de Previsión y Asistencia Social para el personal del Ministerio de Educación (Ipasme), el 31 de agosto de 2022.
«Quedan muchas exigencias por cubrir, como el pago del 100 % de nuestras primas. Pero no hemos planificado por los momentos un paro nacional. Sin embargo, hay que recordar que tenemos escuelas y liceos en paro técnico obligado, que están clausuradas desde la pandemia y ni siquiera han podido abrir sus puertas por las condiciones en las que se encuentran», dijo la presidenta de Formación de Dirigentes Sindicales (Fordisi), Gricelda Sánchez,
Entre las principales solicitudes de los maestros y maestras en Venezuela está la eliminación del instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), la homologación del salario y las pensiones a la canasta básica, seguridad social y hospitalaria, pago de retroactivos y garantía de acceso a servicios públicos. Aseguran que continuarán alzando la voz mientras el Estado permanezca en silencio.
«Si quisiéramos, los educadores podríamos ir a huelga. Un paro nacional no sabemos si se va a producir, porque va a depender de cómo vayan reaccionando las bases trabajadoras. En este momento hay unidad en las bases sin importar las preferencias políticas de cada quien», expresó Elsa Castillo, dirigente de la Federación Venezolana de Maestros (FVM).
Las próximas acciones
Griselda Sánchez comentó que en septiembre el gremio docente iniciará una campaña comunicacional en redes sociales, con el fin de visibilizar sus principales problemas.
Por otro lado, Raquel Figueroa, coordinadora de la Unidad Democrática del Sector Educativo y dirigente sindical de la Federación del Colegio de Profesores de Venezuela, agregó que las acciones en octubre están sujetas a las decisiones que tome el gobierno de Nicolás Maduro sobre la educación en el país.
«El año inicia con que el magisterio aún no ha finalizado la discusión y firma de la tercera convención colectiva de todos los trabajadores de la educación. Eso indudablemente, en vista de una deuda del gobierno del 280 % de aumento salarial desde octubre de 2018, es un elemento negativo. Aparte no hay una claridad de parte del Estado de que el magisterio obtenga su tercera convención colectiva», dijo Figueroa.
Calificó de «complejo» arrancar el año académico 2022-2023. Agregó que las problemáticas de seguridad social y alimentaria, recursos e infraestructura persisten y se han agudizado en los planteles del territorio nacional. Además, la deserción docente supera el 60 % según la FVM.
«Puede iniciarse el año con diversas actividades para exigir a las federaciones que el proyecto de convención colectiva que está ahorita en discusión se convierta en un pliego conflictivo, que de acuerdo a la Ley de Trabajo tiene su agenda de protestas. Puede llegar incluso a paralización y hasta huelga, porque eso es un derecho humano», comentó Figueroa.
Por otro lado, las concentraciones continuarán este mes en Venezuela, especialmente en la capital. Otra manifestación, esta vez de todo el sector público, está prevista a realizarse el 6 de septiembre en Caracas.
La lucha docente en Venezuela: cronología de ocho meses de protesta
Al menos 400 mil educadores llevan nueve meses protestando a nivel nacional por la homologación de sus sueldos a la canasta básica, que para julio de 2022 se ubicó en 470,44 dólares, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM).
En la tabla salarial actual, un docente de nivel I que trabaje 53 horas a la semana gana mensualmente 439 bolívares, equivalentes a 55 dólares según la tasa de cambio del Banco Central de Venezuela (BCV) del 2 de septiembre.
No planean abandonar
«Dependiendo de cómo vayan las cosas, en octubre vamos a incorporarnos con la condición de que se entienda que hay que resolver el conflicto del sector educación. Porque tampoco podemos dejar las escuelas en manos de cualquiera. No estamos dispuestos a abandonar nuestros espacios», apuntó Sánchez.
Figueroa apoyó la ocupación de los planteles y rechazó la intervención de grupos partidarios del gobierno en los colegios venezolanos. Recordó que el Estado permite que miembros del Plan Chamba Juvenil, sin preparación o pedagogía, impartan clases en los salones, en un intento de cubrir los puestos vacíos que han dejado los profesores especialistas.
De hecho, en octubre de 2021, la ministra de Educación, Yelitze Santaella, señaló que se habían incorporado 1.700 jóvenes para dictar materias en escuelas públicas del estado Zulia, al oeste del país.
Aulas en emergencia
Aún no hay números que indiquen el estado del sistema escolar del país en el primer semestre de 2022. Sin embargo, Cecodap (Centros Comunitarios de Aprendizaje) alertó el 6 de julio que el 2021 estuvo caracterizado por planteles deteriorados, graves fallas de servicios públicos, deserción docente y limitaciones en el programa de alimentación.
Su balance anual arrojó que 59 % de las escuelas encuestadas a nivel nacional reportó daños de infraestructuras y fallas de electricidad y el 89 % registró déficit de educadores, especialmente en el área de ciencias. El 63 % de estos centros educativos cubría la ausencia de profesores con personal jubilado o profesionales de otras áreas diferentes a la educación, pero con experiencia pedagógica, afirmó la ONG.
El gobierno de Nicolás Maduro no ha mostrado señales de reunirse con los docentes, advierten los gremios. No obstante, aseguran que el sector se ha unificado con el objetivo de abordar la emergencia declarada en las aulas venezolanas.
Con información de Efecto Cocuyo /Fotos cortesía