“La tierra provee lo suficiente para saciar la necesidad de cada hombre, pero no la avaricia de cada hombre”
Gandhi
Upata 10 de Julio del 2023
Américo De Grazia
¿Sabía Ud cuál es el único país del mundo que cuenta con Tepuy dentro de su geografía? Si, efectivamente, Venezuela. El Yapacana es uno de ellos, convertido en parque nacional el 12 de diciembre de 1978, ubicado en el corazón de nuestra amazona, limitando con Brasil y Colombia. Ocupa un espacio de 3200 Km2, que equivale a toda el área metropolitana de Caracas y el Edo Miranda juntos. Hoy, gracias al régimen de Maduro, este icónico Tepuy está siendo depredado a velocidades inimaginables, apreciadas por imágenes satelitales aportadas de modo sistemático por la asociación civil, @SOSorinoco, donde se observa claramente el area afectada convirtiendo el parque en zona franca de la minería salvaje.
Los indígenas convertidos en instrumentos de su propia destrucción, colonizados por el narco terrorismo del ELN y las FARC en complicidad con las FANB. Y los criollos en piezas de utilería, tal como ocurre con Yerimar Carrasquel, secuestrada por el ELN en abril del 2023. Quienes se enfrentan a la minería corren el mismo destino de Virgilio Trujillo Arana, líder indígena Uwottuja, asesinado el 30/Junio/2022, igual que otros 32 voceros Indigenas que sufrieron el mismo destino desde el 2013 al 2021, los narcoterrorista asesinaron 21 y otros 11 fueron ejecutados por las FANB. Dándoles tres opciones a los pueblos Indigenas, (1) ser socios mineros, (2) ser desplazados de la “zona franca”, (3) el destino de Virgilio. Pueden escoger “democráticamente” su futuro.
Esta “zona franca”, está claramente demarcadas por sus operadores, fuertemente armados con R-15 (fusiles de asalto americanos, suministrados por el cartel de Sinaloa) y AK-47 (de fabricación rusa, suministrada por la dictadura cubana). Todos forman parte del cartel del oro de sangre.
Yapacana no forma parte oficialmente del “arco minero de Maduro”, decretado en febrero del 2016, pero si, de manera fáctica, bajo modalidades particulares, como las que se registran en el parque nacional Canaima. Esa modalidad impide el otorgamiento de “alianzas mineras” (forma inconstitucional de entregar licencias para ejercer la minería). Por eso necesitan mostrar a los indígenas como los depredadores, convirtiéndolos de vitrina, para ocultar a los más poderosos beneficiarios. Mientras las FANB despliegan una “encomiable y digna labor patria en procura y defensa de nuestro ambiente”. Nooo mejoraaaa nada el enfermo. Por su parte, las dos franquicias narcoterrorista colombo-cubanas del ELN y las FARC, son los instrumentos de custodia, resguardo y agentes de retención o recaudación de dividendos; obvio, políticamente más confiables que los pranes (banda criminales) o los Garimpeiros brasileños. Ese oro o diamante no ingresa al fisco nacional, vale decir al BCV, pero si, a la mafia roja, rojita. Todo lo saqueado se va por los “caminos verde olivo”.
Aquí no hay soluciones mágicas, por eso hoy más que nunca debemos poner el énfasis en unir a todos los factores políticos en función de un plan de país, escoger un liderazgo presidencial y construir una dirección que diseñe las estrategias correctas y oportunas. Para que la épica electoral no termine en una hípica ociosa e inútil.