Diosdado Cabello anunció que el partido cambió la reglas para evaluar los resultados de los comicios internos y el dirigente Freddy Bernal señaló que vencer en las internas no implica convertirse en candidato del PSUV para el 21 de noviembre
Diosdado Cabello, informó este lunes que el chavismo “revisará” las candidaturas de al menos siete estados de Venezuela, al no cumplir con los parámetros de las elecciones primarias que se realizaron el domingo para los comicios regionales y municipales de noviembre próximo. El alto dirigente de la dictadura maneja una de las corrientes internas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), en el que mantiene una sorda disputa por el poder con Nicolás Maduro, actual cabeza del gobierno.
Casi al mismo tiempo, el candidato chavista a la gobernación del fronterizo estado Táchira, al occidente de Venezuela, Freddy Bernal, aseguró que la dirección nacional del PSUV podría desconocer los resultados de las elecciones primarias e imponer candidatos distintos a los ganadores de la consulta interna.
“Que un compatriota haya ganado las primarias en alguno de los 29 municipios, eso no implica que automáticamente sea el candidato o la candidata a la alcaldía. ¿Por qué? Es sencillo. Una cosa es el debate interno y otra la batalla hacia el 21 de noviembre. Y nosotros tenemos la obligación de ver hacia el 21 de noviembre, cómo ganar cada una de las 29 alcaldías del estado Táchira”, dijo Bernal, quien además, ostenta el cago de “protector” de esa entidad regional, atribuyéndose facultades por encima de la actual mandataria tachirense, la opositora Laidy Gómez.
Asimismo, indicó que la dirección nacional del Psuv analizará, hará encuestas, proyecciones, revisiones, y tomará las mejores decisiones para la victoria”.
La revisión de las candidaturas
Cabello explicó en rueda de prensa que los postulados debían sacar el 50 % de los votos, como mínimo, y una diferencia de 10 puntos con respecto al segundo lugar, establecido en el reglamento interno del partido.
“(El) 50 % no es fácil sacarlo en una elección donde tienes 20 candidatos, entonces el comando político ha decidido que ya no será para los gobernadores 50 % mínimo, sino que sea 40 %. Es un baremo que hemos establecido y además debe garantizar que tenga más de 10 puntos de ventaja sobre el segundo lugar”, señaló.
Esta condición también fue modificada para las postulaciones a las alcaldías venezolanas, donde los candidatos deberán obtener el 35 % de los votos e igualmente la diferencia de 10 %.
“Queremos consolidar candidaturas unitarias, que vayan fortalecidas, que las condiciones que hubo en la campaña beneficien la unidad revolucionaria por encima de todo, que no haya posiciones irreconciliables y que un grupo se vaya por un lado y que otro grupo se vaya por otro lado y ahí viene la revisión”, añadió.
“Pasar a revisión no significa que eliminas a uno o a otro; evaluamos las condiciones electorales, las alianzas electorales con el Gran Polo Patriótico (GPP) y vamos tomando las decisiones. Tenemos hasta el 29 de agosto para la inscripción de candidatos”, explicó.
Otros criterios serán la “realidad política” de los estados y municipios, como por ejemplo, la “fortaleza” de algún candidato de la oposición frente al chavismo, si algún postulado por el GPP “supera” al candidato del PSUV o si hay denuncias sobre presuntas irregularidades o arbitrariedades “y se demuestran con pruebas, nosotros tomamos la decisión”.
“Nosotros evaluamos la conducta de nuestros candidatos, vimos debilidades y eso quedó registrado. Todavía estamos recibiendo denuncias de gente que se cree dueña de todo y atropellan a los demás. Tienen conducta de todo, menos revolucionaria”, sostuvo.
El domingo, el PSUV llevó a cabo sus elecciones primarias para elegir a los candidatos para las gobernaciones y alcaldías que serán votadas el próximo 21 de noviembre.
Cabello celebró la asistencia a las primarias, abiertas a militantes y simpatizantes del chavismo sin carné del PSUV, que cifró en 5,5 millones de personas.
Sin embargo, aseguró que, debido a la alta participación, finalmente solo depositaron su voto 3,5 millones de personas, puesto que muchos, al ver las filas, dijeron “no, yo no voy a votar”.
Con información de EFE